Saber sufrir…
Barcelona venció 2-1 a un Athletic de Bilbao que se la complicó. Messi la metió en el final y así los de Guardiola siguen sacándole cinco puntos al Real Madrid.
En Madrid se relamían: el Barcelona sufría en el Camp Nou ante un Athletic de Bilbao que se la complicó. En Madrid lo gritaron: el equipo de Guardiola ganaba 1-0 y Busquets le hizo un claro penal a Llorente que Iraola cambió por gol. En Madrid desesperaron: el equipo de Messi arrinconó a su rival y la propia Pulga hizo que la diferencia de cinco puntos siga existiendo con un gol definido fuerte y arriba.
Al Barcelona le costó más que de costumbre vencer al Bilbao en su cancha. Sin embargo, demostró que sabe sufrir. En un partido polémico, los de Pep apabullaron a su rival tras el empate y así mantuvieron su brecha sobre el Real Madrid.
Villa fue el que abrió el resultado al fusilar a Iraizoz, que nada pudo hacer. Ahí, cuando a los 3' el Barcelona ya ganaba, se esperaba el monólogo, pero los de Caparrós saben cómo hacer transpirar la gota gorda. Llegó el penal, el empate y, por suerte para el conjunto blaugrana, un Messi inspirado que, después de que no le cobraran un penal, lo empujó a la victoria.
Barcelona venció 2-1 a un Athletic de Bilbao que se la complicó. Messi la metió en el final y así los de Guardiola siguen sacándole cinco puntos al Real Madrid.
En Madrid se relamían: el Barcelona sufría en el Camp Nou ante un Athletic de Bilbao que se la complicó. En Madrid lo gritaron: el equipo de Guardiola ganaba 1-0 y Busquets le hizo un claro penal a Llorente que Iraola cambió por gol. En Madrid desesperaron: el equipo de Messi arrinconó a su rival y la propia Pulga hizo que la diferencia de cinco puntos siga existiendo con un gol definido fuerte y arriba.
Al Barcelona le costó más que de costumbre vencer al Bilbao en su cancha. Sin embargo, demostró que sabe sufrir. En un partido polémico, los de Pep apabullaron a su rival tras el empate y así mantuvieron su brecha sobre el Real Madrid.
Villa fue el que abrió el resultado al fusilar a Iraizoz, que nada pudo hacer. Ahí, cuando a los 3' el Barcelona ya ganaba, se esperaba el monólogo, pero los de Caparrós saben cómo hacer transpirar la gota gorda. Llegó el penal, el empate y, por suerte para el conjunto blaugrana, un Messi inspirado que, después de que no le cobraran un penal, lo empujó a la victoria.
No comments:
Post a Comment